Pasar “un buen rato” con una misma, ya sea en el sofá, en la cama, haciendo la cena, o en la ducha, siempre es una buena idea. Dejando a un lado los eufemismos, la masturbación es, cada vez más, una de las actividades favoritas de las mujeres a la hora de buscar un ratito de placer.
En este post, hablaremos del onanismo en la ducha, una opción con muchas posibilidades en la que el límite solo lo pone tu imaginación. Hemos recogido algunas ideas para alcanzar el orgasmo bajo la ducha o sumergida en la bañera, con los dedos de tu mano o con un juguete sexual, a través de la estimulación vaginal o del clítoris… ¡Ahí van!
¿Se masturban las mujeres en la ducha?
Cada vez es más abundante la literatura científica acerca de la masturbación, tanto masculina como femenina. Las universidades e instituciones médicas llevan a cabo numerosas encuestas al respecto, como la de LAD Bible. Esta empresa entrevistó a 1.000 personas de Estados Unidos y Reino Unido y concluyó que de todas las personas que se masturbaban en la ducha (1 de cada 20), el 51% eran hombres y el 28% eran mujeres.
A continuación, expondremos algunas ideas para mejorar los encuentros íntimos de las mujeres en la ducha y quizá así consigamos que suba el número de personas con vagina que se masturba bajo la alcachofa de la ducha.
Crea el ambiente adecuado
El escenario y los detalles siempre son importantes. Tanto si vas a mantener relaciones sexuales con alguien como si vas a tenerlas contigo mismo, deberías cuidar el entorno. En el caso de que vayas a tomar un baño con la intención de masturbarte, te sugerimos que enciendas unas velas eróticas o que eches al agua unas sales de baño. Incluso, puedes darte un automasaje previamente con un sugerente aceite de masaje erótico. De este modo, tú misma te vas poniendo a tono.
Aprovecha el chorrito de la ducha
La técnica de enfocar el chorrito de la alcachofa de la ducha hacia el clítoris es, sin lugar a dudas, una de las favoritas entre las féminas. Y no es para menos, ya que da mucho juego. Puedes jugar con los diferentes tipos de chorros e intensidades y así experimentar distintas presiones en el clítoris. El resultado es espectacular. De hecho, si además de jugar con presión del agua, vas cambiando la temperatura, es muy posible, que alcances el orgasmo en tan solo unos minutos.
Aplícate el lubricante que más te guste
Existen infinidad de lubricantes que puedes aplicarte en la vagina antes de entrar en la ducha. Elige el que más te apetezca para la ocasión. Seguro que tienes uno que es tu favorito. Bien, pues aprovecha el momento de extenderlo para comenzar con los primeros movimientos de los dedos para la masturbación.
Mueve los dedos siguiendo tu intuición
Una vez en la ducha o en la bañera, ha llegado el momento de la masturbación. No existen reglas infalibles en cuanto a qué tipo de movimientos son correctos y cuáles no, ya que, lo más importante es que escuches a tu cuerpo, él te irá marcando el ritmo que deben seguir tus dedos. Puedes comenzar jugueteando con el clítoris pasando la yema de los dedos por encima y cambiando la presión para intensificar la estimulación. Verás que, en pocos segundos, el cuerpo te pide más… ¡dáselo y disfrútalo!
Cambia de posición
Si no tienes prisa y has pensado pasar un buen rato, una buena idea es ir cambiando de postura. Algunas de las más utilizadas son de pie con las piernas separadas y apoyada de frente contra la pared o sentada en el suelo de la bañera con las piernas semiflexionadas.
Practica ejercicios de Kegel
Al realizar ejercicios de Kegel (rutinas para el fortalecimiento del suelo pélvico) aumenta la circulación de la zona genital. Esto hace que, según los expertos, si realizas estos ejercicios durante uno o dos minutos, prepares el camino hacia el orgasmo en la bañera, o en cualquier otro lugar.
Utiliza juguetes sexuales sumergibles
Succionadores de clítoris, vibradores, dildos, balas vibradoras… Existen infinidad de juguetes sexuales que pueden convertirse en el aliado perfecto a la hora de la masturbación en la ducha o en la bañera. En principio, lo más importante es que te fijes si el juguete en cuestión es sumergible. Si lo es, no lo dudes, coge el succionador de clítoris, la bala vibradora o el consolador y métete en la ducha con él. Una buena idea puede ser fijar un dildo con ventosa en el suelo de la bañera para la estimulación tanto vaginal, como clitoriana o anal.
La masturbación de los hombres en la ducha
La primera recomendación que hacen los expertos en cuanto a la masturbación, tanto masculina como femenina, es que se ha de buscar un lugar donde sepas que nada ni nadie te va a interrumpir. Por esta razón, la ducha es el lugar escogido por muchas personas con pene a la hora de practicar el onanismo. Ahora bien, no parece que la masturbación bajo la ducha sea la opción ideal para los hombres. Y es que, entre otras cosas, estos no pueden aprovechar el chorrito con tanta efectividad como las mujeres.